domingo, 15 de diciembre de 2019


Si miras fijo al Sol por un segundo y luego miras otras cosas alrededor, verás que hay un parche oscuro sobre ellas, y no puedes identificarlas. Igualmente, una vez que obtienes la visión de Dios, quien es más refulgente que mil soles, no puedes ya reconocer la multiplicidad llamada naturaleza (prakriti). El mundo es negro, está bloqueado; es más , ya no puedes reconocer o manejarte con la variedad una vez que has tenido la visión de la Unidad básica. Tomen la pantalla en el cine. Cuando la película está pasando, no ves la pantalla, solo ves la película. Cuando termina, puedes ver solo una pantalla, una pantalla que no tiene ningún mensaje- ni voz o nombre, color o credo. La pantalla completa se perdía en la imagen. La pantalla es Brahman. Brahman es Verdad ( Satyam), el Universo es Brahman. Aquello es el Ser (Sat); esto es Consciencia (Chit). Saberlo y tratar con ambas es Bienaventuranza (Anandam


Es la mente la que decide el 
deseo y lo dirige.
La cuarta flor que debe ofrecerse a Dios, es “kshama”: la tolerancia o fortaleza. “Kshama” es: verdad, rectitud, conocimiento, sacrificio y alegría. ¡Sin “kshama” nadie puede ser feliz ni por un momento! “Kshama” desarrolla las cualidades divinas y revela la Divinidad en su interior. Deben realizar el “sadhana” (prácticas espirituales) para ganarla y establecerse en ella. Abriguen la idea de que Dios está igualmente presente en todos, a pesar de la burla del ignorante y de la sarcástica crítica de los ciegos, o aun de la alabanza de los admiradores. La quinta flor es “shanti”: la paz interior. “Shanti” no significa que a pesar de lo que los otros digan o de su maltrato, uno no deba reaccionar en absoluto. No significa que uno tiene que permanecer callado como una roca. Implica el dominio de los sentidos y las pasiones. La paz interior debe volverse nuestra propia naturaleza. “Shanti” tiene al desapego como cualidad básica. El mar, al que le gusta acumular y poseer, permanece abajo; la nube, a la que le gusta renunciar y dar, está en lo alto del cielo.



El Amor está más allá del 

poder  de  las 

palabras